Diversas son las técnicas que existen en la actualidad para la depilación, y por eso es importante conocerlas bien y saber cuál es la más indicada para nuestras necesidades:
Cera Tibia: su duración es de tres a cuatro semanas, puede aplicarse en todo el cuerpo pero hay que tener especial atención en la zona inguinal y axilar, de modo de evitar que los folículos pilosos queden abiertos y expuestos al ingreso de bacterias. No se recomienda en caso de várices o problemas de irrigación sanguínea.
Máquinas eléctricas que arrancan el vello de raíz: su duración también es de tres a cuatro semanas, aunque con la utilización de esta técnica se corre el riesgo de cortar algunos pelos en forma superficial, los que luego crecerán con más rapidez. Se puede aplicar en todo el cuerpo, excepto en la zona facial. Últimamente han aparecido máquinas que traen incorporada una banda helada “antidolor”, cuya función es dar un masaje en la zona y aliviar el dolor del tirón.
Máquinas de afeitar desechables: su duración es de dos a tres días, porque el pelo no se arranca de raíz, sino que se corta a ras de piel. Puede utilizarse en todo el cuerpo, excepto en la cara. Se recomienda en los casos de várices y problemas de mala circulación.
Depilatorios químicos: su efecto es semejante al de la técnica anterior, es decir, rasura el pelo de la superficie de la piel. Es importante tener cuidado con el tiempo de exposición al producto, ya que pasarse más allá de lo recomendado por los fabricantes puede producir una irritación. Se recomienda probar primero en una zona pequeña, y ver si produce alguna reacción. En caso de utilizarlo en la cara, es preciso evitar el sol en forma directa, ya que puede ocasionar manchas cutáneas.
Fotodepilación: esta técnica consiste en aplicar un haz de luz sobre una zona de la piel, con el fin de quemar el área del folículo piloso. Quienes la realizan sostienen que es definitiva en un 80 a 90% del área tratada. Se debe aplicar durante tres o cuatro meses, y para mejores resultados se recomienda efectuarla en la etapa de crecimiento del pelo. Se puede utilizar en cualquier zona del cuerpo, aún en las más sensibles. Se recomienda para personas con problemas de hirsutismo o de crecimiento anormal de vello.
Láser: también utiliza la técnica de quemado del folículo piloso, aunque en este caso se realiza con una luz emitida por láser. Para que sea definitiva, hay que realizarla en forma constante, durante varios meses. Se puede aplicar en todas las zonas del cuerpo, y es especialmente recomendable para pelos oscuros en una piel clara. Este método es un poco más lento que el anterior, ya que se aplica en áreas más pequeñas (5 mm versus 10 cms).Artículo relacionado:
Clínica Alemana Adquiere Los Más Modernos Láseres DermatológicosAguja eléctrica: esta técnica consiste en introducir una aguja en el folículo de cada pelo, y una vez allí, emitir un impulso que destruya la raíz. Es recomendable para tratar zonas pequeñas, ya que en cada sesión sólo se puede eliminar una pequeña área de vellos.
